El tiempo Maya es circular avanza hacia adelante, nunca termina, lo conforman ciclos que han existido siempre, y que seguirán existiendo eternamente. Es el respirar de Hunab-Kuh, el respirar de Dios. Esos ciclos también existen en nosotros para permitir la transformación de nuestra mente y la Evolución de nuestra consciencia y nuestra civilización hacia la armonía.